Hoy dedicamos esta entrada a una iglesia singular, la más antigua de la ciudad de A Coruña, la iglesia de Santiago Apóstol.
Esta iglesia se encuentra en la zona denominada “Ciudad Vieja” a escasos 150 metros al sudeste de la plaza de María Pita, famosa por su belleza, con sus edificios porticados y por acoger también la sede del Ayuntamiento coruñés.
La iglesia no es de grandes dimensiones, pues mide alrededor de 36 x 18 metros y está orientada con ligera desviación al sur. Está construida sobre la roca viva que aflora hacia la calle Santiago. La planta tiene forma de cruz latina y un precioso altar mayor. Los muros laterales se articulan mediante contrafuertes y dos portadas formadas por arcos de medio punto.
Se trata de una iglesia originalmente románica, con posteriores retoques góticos, cuya estructura inicial, propia de la escuela compostelana del siglo XII, fue construida en el año 1217, a instancias del rey Alfonso IX, y compone una de las fuentes de riqueza arquitectónica religiosa más importantes de la ciudad de La Coruña. Fue el primer templo de la actual A Coruña y el hecho de que se dedicase a Santiago orienta sobre los afanes jacobeos del monarca y sobre uno de sus objetivos: la acogida a los peregrinos que ya en el siglo XIII recibía el puerto, aunque sin alcanzar la afluencia de gran parte de las dos centurias siguientes. Una prueba de esta política es el hecho de que al lado de la iglesia se situara un hospital de peregrinos. Son visibles todavía sus iniciales influencias artísticas compostelanas, pese a las reformas posteriores.
Esa clara advocación Jacobea ya se advierte en la mayoría de los ornamentos o motivos de la decoración que la compone, como las tres semi-columnas labradas con motivos del camino de Santiago o bien como el tímpano con la figura del Apóstol a caballo. Se encuadra en la escuela compostelana y cabe decir que ha sufrido varios incendios y se ha reconstruido varias veces, pero en todo caso ha sabido mantener su esencia.
La profusión de imágenes de Santiago en el templo es única. La portada principal, gótica (siglo XV), se flanquea entre dos grandes estatuas de Santiago y su hermano Juan en su faceta de apóstoles, incluyendo en el tímpano otra moderna de un Santiago caballero. En el hermoso interior la iconografía jacobea está presente en diversos detalles decorativos alusivos, como las veneras y tres imágenes del santo, una medieval sedente a los pies del templo y otras dos muy posteriores: una preside el altar mayor y la segunda es un casi inevitable matamoros de finales del siglo XVIII.
Junto con la Colegiata de Sta. María del Campo, muy próxima, conforma una parte del importante conjunto histórico de la ciudad y de sus “rincones entrañables”. Pertenece a la Archidiócesis de Santiago de Compostela.
La iglesia de Santa María está erigida sobre un solar que fue considerado sacro en la época del imperio, posiblemente un antiguo templo romano, si bien se considera como románica, hay que decir que aparte de los exteriores del ábside y el muro norte, pocos elementos románicos hay en su interior.
El primero de abril del año 1779 sucedió un terrible incendio en la iglesia, que destruyó casi todo el templo, dejándolo en ruinas. Luego de eso, se reconstruyó en lo que conocemos hoy como la Iglesia de Santiago.
Pero vayamos por pates y analicemos su estructura y contenido:
La planta, originalmente, estaba dividida en tres naves y ábsides, contando así con tres puertas, dos laterales y la entrada principal. En el interior, las tres naves han desaparecido, dejando paso a una planta de salón a la que abren los ábsides. De la primera se conserva una piedra con una inscripción de la fecha de su construcción, 1133, y de la segunda capilla existe un púlpito gótico de piedra esculpida.
La desaparición de la estructura original románica, dio lugar a una única nave, ya gótica, con arcos diafragma apuntados plenamente góticos, que sustentan un tejado de madera a dos aguas. Los estribos de estos arcos son pilastras con capiteles originales de las naves laterales del templo inicial. En consecuencia, la planta es basilical de una sola nave pero la existencia de tres ábsides nos hace recordar su origen con tres naves respectivas. El ábside nos recuerda al de la Colegiata de Santa María de Campo. La cubierta es a dos aguas y está construida en madera. Descansa sobre arcos apuntados y lo sostienen pilares adosados a los muros y reforzados, como decíamos antes, con contrafuertes.
Los cilindros absidales, de mayor altura el central, lucen semi-columnas adosadas alzándose a partir de amplio basamento y rematando en capiteles que junto con canecillos decorados contribuyen a sustentar la cornisa.
En el tímpano de su puerta de entrada, bajo la entrada formada por arcos de medio punto, figura una estatua ecuestre de Santiago Matamoros portando una estentórea espada de color verde, franqueado por dos figuras masculinas en las jambas: Santiago a la derecha y San Juan a la izquierda.
En el tímpano de la portada norte, de inspiración mateana, se encuentra una representación del “Agnus Dei”, entre grandes flores, con rosetones que decoran la arquivolta. En la bancada lateral de la puerta, donde los peregrinos descansaban, podemos observar una casi perdida cabeza de toro.
Como anécdota decir que muchos visitantes tienden a ver (normalmente inducidos por los guías turísticos) a ver el año 1411, formado por las patas del cordero. Si agrandáis la imagen, seguramente vosotros también la veáis.
Hay que destacar también, en la portada principal la presencia de un maravilloso rosetón ojival, de notables dimensiones sobre la embocadura del ábside central. Es interesante, en la fachada, la colección de canecillos con figuras grotescas (1150 ca-1690).
Estructuralmente, en el interior lo que se ha conservado de mejor manera de la construcción original es la cabecera donde se encuentra un rosetón en el ábside central. Los tres ábsides lucen dobladura en su embocadura, y arcos triunfales al modo benedictino. Aún se conserva su torre del siglo XVII.
En el interior del templo encontramos una imagen de Santiago sedente, ya tardo románica, de los siglos XIII y XIV. Santiago sostiene un pergamino con la inscripción en latín “Jacobus Major Hipaniae Patronus” (recordemos que Santiago es el principal patrón de España). Además de la estatua de Santiago, la Iglesia contiene otras imágenes del Arcángel Gabriel, San Miguel, San Juan Evangelista, San Pedro y una Custodia. Hay que destacar una Crucificado de gran belleza. También hay dos curiosas dos imágenes poco frecuentes, en una misma iglesia: La Virgen amamantando a su Hijo y la Virgen embarazada, amamantando al Niño. Igualmente conserva en su interior, varios sepulcros antiguos, aras romanas, procedentes de la Torre de Hércules (del siglo II d.C.), varias lápidas recuperadas tras varios procesos de excavación arqueológica y un púlpito de piedra del siglo XVII.
Antaño se consideraba la iglesia más importante de A Coruña, hasta tal punto que en su atrio se reunía el ayuntamiento en los siglos XIV y XV. También funcionó temporalmente como almacén de municiones y documentos.
En 1589, ante el asedio por las naves y tropas del inglés Francis Drake, que pretendía llegar hasta Santiago y su sepulcro apostólico, los vecinos prometen un voto anual a la Virgen del Rosario, actual patrona de la ciudad, si logran vencer al enemigo.
Cabe decir también que el gremio de comerciantes tuvo su sede en este templo, ya que Santiago era su patrón, lo que incidiría en la relevancia de la peregrinación jacobea para la economía de la ciudad.
Catalogada como Bien de Interés Cultural desde 1972.
Por otro lado hay que decir, para aquellos lectores que lo desconozcan, que existe una ruta del Camino de Santiago que trasladaba a los peregrinos británicos, irlandeses y del norte de Europa, que pretendían evitar las frecuentes guerras centroeuropeas. Y en A Coruña, el punto de arranque obligado era la iglesia de Santiago, casi a la salida de las antiguas murallas de la ciudad.
Se trata pues de un templo de gran tradición jacobea, ante la que comienza el Camino Inglés en A Coruña, tal y como lo atestigua, entre otras fuentes, una lápida. Hay que decir que la ciudad de A Coruña constituía uno de los principales puertos medievales de peregrinos.
En los siglos XIV y XV, los de mayor afluencia peregrinatoria a Santiago a través de A Coruña, el punto de inicio de la ruta pedestre se situaba en realidad en el mismo puerto, donde desembarcaban cientos o miles de peregrinos, según los años, procedentes de diversas ciudades de la fachada atlántica europea, sobre todo de Inglaterra. No obstante, a ella comenzaron a acudir muchos peregrinos que, tras desembarcar en la zona portuaria, daban gracias por la travesía a un Apóstol siempre dispuesto a recibirlos.
En cualquier caso, responde a profundas raíces históricas que sea ahora esta iglesia el simbólico punto de inicio del tramo terrestre del Camino Inglés. A ella acudían muchos de los peregrinos que, tras desembarcar unos pasos más abajo, en la zona portuaria, pasaban a dar gracias por la travesía a un Apóstol que ya pronto iban a saludar en Compostela.
La iglesia de Santiago constituyó el primer templo religioso de la actual A Coruña y el hecho de que se dedicase su advocación al Apóstol Santiago revela el afán jacobeo del monarca Alfonso X, quien impulsó el papel de A Coruña como vía de entrada a Compostela. Una prueba de esta política alfonsina es el establecimiento de un hospital de peregrinos en las proximidades del santuario.
Tal y como decíamos anteriormente, la profusión de imágenes de Santiago en el templo es única: la portada principal se flanquea entre dos grandes estatuas de Santiago y su hermano Juan como apóstoles, incluyendo en el tímpano otra figura más moderna de Santiago Matamoros, quien según las crónicas medievales intervino milagrosamente en favor de los cristianos contra los musulmanes durante la Batalla de Clavijo (844 d.C.).
No en vano, en esta iglesia, y el día 25 de julio, día de Santiago, existía el mismo rito que al llegar a la Catedral de Santiago: abrazar la figura del apóstol. Todavía hoy, se puede reconocer un recorrido casi invisible por detrás de esta figura.
Y esto es todo por hoy, esperemos os haya resultado interesante.