Asistimos un año más a la Feira Celta que se celebra en Porto do Son, con la buena nueva de que sigue una magnífica evolución.
No sólo ha crecido el número de puestos de artesanos y de exhibición de oficios, sino que también lo ha hecho el número y calidad de las actividades que conforman el programa diseñado para los tres días, 26 a 28 de julio, en que tuvo lugar.
La villa, ya de por sí, se presta para acoger generosa y espléndida a cuantos visitantes nos acercamos, pero es que además el bullicio que se alcanzó en las calles, con diversas actividades musicales y de animación, redondearon, en nuestro caso, un hermoso domingo.
En nuestra opinión merece especial reconocimiento el trabajo la Fragua de Vulcano, que demuestra que sabe lo que hace. Nuestra amiga Irene, de Arco da Vella, magnífica artesana que vende productos en plata nos contó que la noche del sábado el espectáculo “Subumbra” resultó espectacular, al desarrollar en gran formato una muestra en la que unos seres se deben a las sombras de la noche y desesperados vagan y se alimentan de energía.
También resultó una grata sorpresa constatar cómo cada vez es mayor el número de personas caracterizadas, para vivir de manera más inmersiva esta preciosa fiesta. De hecho, tenemos que destacar la presencia de nuestra amiga Lupe, de trajemedieval.com, a la que tuvimos oportunidad de saludar mientras atendía y asesoraba a sus clientes.
Los más pequeños dispusieron también de una zona pensada para ellos, con campamento para actividades diversas, como luchas de bárbaros, explicaciones sobre el uso de armas y talleres. También hubo varios espectáculos de títeres.
Desde luego el año próximo, volvemos.