En nuestra senda repasando los grandes personajes de la historia, hoy nos vamos a centrar en una figura singular, Mahatma Gandhi, un pensador y político hinduista mundialmente conocido por líder un movimiento nacionalista contra la, entonces, dominación británica de su tierra natal.
Sus seguidores lo llamaban de diversas formas: Gandhi, Bapú (bāpu: ‘padre’) o Mahatma Gandhi (majātmā significa ‘gran alma’, siendo majā: ‘grande’; y ātmā: ‘alma’), título que le había dado el poeta Rabindranath Tagore.
Considerado como uno de los grandes líderes políticos que modificaron la configuración política e ideológica del mundo en el siglo XX.
Gandhi fue encarcelado muchas veces y se convirtió en un héroe nacional. Abogó por la superación de las rivalidades religiosas de su país (que solían enfrentar a hindúes y musulmanes) y por la reforma de la sociedad de castas.
Biografía de Gandhi
Su nombre completo era Mahatma Gandhi es Mohandas Karamchand Gandhi. Nació el día 2 de octubre del año 1869, en Porbandar, una ciudad del actual estado de Guyarat en la India.
Sus padres era Karamchand Gandhí, un importante personaje, pues llegó a ser primer ministro (diwan) de los estados de Porbandar y Rajkot. En cuanto a su madre, Putlibai, era la cuarta esposa de Kaarmanchand. Ella influiría notablemente sobre su hijo. Se trataba de una mujer procedente de la secta de los pranamis, quienes mezclaban el hinduismo con las enseñanzas musulmanas del Corán.
A edad muy temprana, apenas 13 años, contrajo matrimonio con Kasturba Makharji, una mujer de su edad y casta. Juntos, tendrían cuatro hijos.
Fue un adolescente retraído y nada brillante en los estudios.
Pasó el examen de accedo a la Universidad, en la de Bombay (actualmente denominada Universidad de Mumbai). Pero se formó en abogacía en el Inner Temple, en Londres. Posteriormente estudió Derecho en la Universidad de Londres, ciudad donde vivió entre 1888 y 1891, período en que se produjo uno de los hechos más determinantes de su vocación: el descubrimiento de Oriente a través de Occidente. De esa época son sus intentos de sintetizar los preceptos del budismo, el cristianismo, el islamismo y su religión natal (el hinduismo), a través de lo que señaló como el principio unificador de todos ellos: la idea de renunciación.
En estos años decisivos para su formación intelectual leyó a León Tolstói, en quien más tarde encontraría el guía para el perfeccionamiento de la práctica y la teoría de la no violencia. Gandhi leyó varios libros de Tolstoi, pero los que más influyeron en él fueron “El Reino de Dios está en ti” y “Carta a un hindú”. Gandhi permaneció en contacto con Tolstoi hasta la muerte de este en 1910.
En lo que respecto a la faceta espiritual y religiosa se vería influido por una gran cantidad de diferentes religiones y creencias: además de por el hinduismo se vería influido por el islam, el cristianismo, el budismo y el jainismo (éste último preconizaba la no violencia y el respeto tanto a los seres vivos como a los distintos elementos, siendo éste un aspecto que utilizaría como base en su lucha política). Para Gandhi todas estas creencias tenían en común la idea de la renuncia.
Una vez finalizados sus estudios, regresó a la India, donde se encontró a su familia desintegrada: la madre había muerto poco antes y los Gandhi habían perdido toda influencia en la corte principesca. Como abogado no halló muchas perspectivas, ya que su primera actuación profesional terminó en un humillante fracaso, pues enmudeció al dirigirse al tribunal y no pudo continuar. Fue entonces cuando una factoría comercial musulmana le ofreció un contrato para atender un caso de la empresa en Durban, y Gandhi no dejó pasar la oportunidad. Se embarcó hacia Sudáfrica en 1893.
Gandhi regresó a la India breve tiempo para llevar a su esposa e hijos a Sudáfrica. A su regreso, en enero de 1897, un grupo de hombres blancos lo atacó y trataron de lincharlo. Como clara indicación de los valores que mantendría por toda su vida, rehusó denunciar ante la justicia a sus atacantes, indicando que era uno de sus principios el no buscar ser resarcido en los tribunales por los daños perpetrados sobre su persona.
En el país de los antiguos colonos holandeses vivía un barrio hinduista formado en su mayoría por trabajadores, a quienes los británicos llamaban despectivamente «sami». Carecían de todo derecho, se les despreciaba y discriminaba racialmente, como pudo comprobar en carne propia el joven abogado durante algunos de sus viajes en ferrocarril. Pero la situación era más grave aún de lo que parecía. Terminado su trabajo, Gandhi estaba a punto de regresar a la India cuando se enteró de la existencia de un proyecto de ley para retirar el derecho de sufragio a los hindúes. Decidió entonces aplazar la partida un mes para organizar la resistencia de sus compatriotas (unos 150.000), y el mes se convirtió en veintidós años.
Durante esa larga etapa de su vida, su mayor preocupación fue la liberación de la comunidad india, y en ella fue dando forma a las armas de lucha que más tarde utilizaría e su país. En los primeros años, convencido de las buenas intenciones del colonialismo británico, abrió un bufete para defender a sus compatriotas ante los tribunales en Johannesburgo y se propuso articular un movimiento dedicado a la agitación por medios legales. Fundó el periódico The Indian Opinion, para aglutinar a la comunidad india y, como instrumento de agitación legal, creó el Partido Indio del Congreso de Natal (1894). Sus simpatías anglófilas le llevaron durante la guerra contra los bóers a organizar el Cuerpo Indio de Ambulancias, acción que mereció duras críticas por parte de los nacionalistas indios.
Entre 1893 y 1914, Gandhi vivió en Sudáfrica y observó las injusticias del régimen racial de ese país. Cuando regresó a la India en 1915, se unió al Congreso Nacional Indio (también llamado Partido del Congreso), un partido nacionalista fundado en 1885.
Pese a que más de un millón de indios lucharon por el Imperio británico durante la Primera Guerra Mundial (1914-1918), el gobierno colonial endureció las leyes represivas contra los movimientos nacionalistas y contra toda persona sospechosa de conspirar contra el régimen colonial. Esto llevó a Gandhi a dirigir grandes protestas.
En la matanza de Amritsar (en el norte de la India) en 1919 más de cuatrocientos indios murieron a manos de tropas británicas. Este hecho impulsó a Gandhi a replantearse sus tácticas políticas y a partir de 1920 lanzó una campaña de no violencia y no colaboración con las autoridades británicas.
Durante el período de entreguerras, Gandhi siguió participando en la lucha anticolonial y fue varias veces encarcelado. Cuando estalló la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), el Congreso Nacional Indio apoyó a los Aliados (entre cuyas potencias se encontraba el Reino Unido) en la creencia de que así se conseguirían mejoras para la India.
Sin embargo, Gandhi se opuso a esta postura, pues consideraba que la libertad democrática por la que decían luchar los Aliados no le era reconocida a la India. Siguió militando por la independencia india, lo que lo llevó a él y a miles de seguidores a ser encarcelados por los británicos entre 1942 y 1944.
La debilidad británica tras la Segunda Guerra Mundial y la llegada al poder de los laboristas, encabezados por Clement Attlee, en 1945 aceleró el proceso de independencia. Las negociaciones entre el gobierno británico, el Congreso Nacional Indio dirigido por Jawaharlal Nehru y la Liga Musulmana de Muhammad Ali Jinnah sobre el Plan Mountbatten (un plan para la división de la India tras la disolución del Raj británico) culminaron en 1947 con la independencia y la partición de la India en dos: la Unión de la India y el Dominio de Pakistán.
La violencia entre hindúes y musulmanes y el fracaso en la construcción de un Estado unitario, por lo que Gandhi realizó diversas marchas con el fin de parar el derramamiento de sangre y restablecer la paz, a pesar de que ambos bandos intentaron atentar contra su vida en diversas ocasiones. Posteriormente iniciaría una huelga de hambre con este fin. Tras cinco días de dicha huelga, los líderes de las diferentes partes accedieron a cesar las hostilidades.
En 1948, Gandhi fue asesinado por un integracionista hinduista, disconforme con la posición tolerante de Gandhi frente a los musulmanes durante la partición de la India, y sus cenizas fueron arrojadas al río Ganges. Contaba Gandhi con 78 años de edad.
Las últimas palabras de Gandhi antes de morir fueron “¡Hey, Rama!”, un mensaje que ha sido interpretado como un último saludo a Rama, uno de los avatares del dios hindú Visnú y liberador de la India del yugo del demonio Rávana según la mitología religiosa contenida en el texto épico Ramayana.
Tras la muerte del líder espiritual el gobierno decretaría trece días de luto. Su cuerpo fue incinerado y sus cenizas repartidas en numerosas urnas que serían distribuidas por la India, muchas de ellas esparcidas por los ríos de su tierra.
La marcha de la sal
La marcha de la sal impulsó la independencia india frente al Imperio británico.
En 1930, Gandhi protagonizó una importante protesta no violenta llamada “La marcha de la sal”, que sirvió de inspiración a líderes posteriores como Martin Luther King. Este evento es considerado una de las manifestaciones más importantes que condujeron a la independencia de la India respecto al Imperio británico, que en ese entonces extraía y comercializaba la sal de manera monopólica.
Gandhi organizó un “boicot contra la sal” que consistió en tomar agua del mar y evaporarla para obtener sal por medios propios. Una multitud imitó este gesto y cerca de 60.000 personas fueron encarceladas, incluido Gandhi.
Los indios no opusieron resistencia a los arrestos y la población pobre continuó evaporando el agua. Las autoridades coloniales no tuvieron más opción que permitir legalmente el acceso a la sal, pues consideraron que un recrudecimiento de la represión hubiera perjudicado su imagen ante las élites indias que contribuían a mantener la estabilidad del orden colonial.
Esta es considerada la primera victoria de la filosofía de la no violencia de Gandhi contra el dominio británico.
La Campaña Quit India
Durante la Segunda Guerra Mundial, 1942, Gandhi lanzó esta campaña, que se puede traducir como (abandona India) pidiendo la salida inmediata de los británicos de la India. Su llamado a la acción fue un momento crucial en la lucha por la independencia.
Este movimiento masivo de desobediencia civil fue reprimido violentamente por las autoridades coloniales, pero sentó las bases para la independencia de India en 1947.
Preceptos de la doctrina de Gandhi
Uno de los preceptos principales de la doctrina de Gandhi era la resistencia pacífica, que consistía en el desconocimiento de las autoridades consideradas ilegítimas a través de actitudes autónomas de desobediencia que no recurrían a la violencia.
Así, se desgastaba la autoridad del grupo dominante, ya que la represión violenta no era respondida y eso le quitaba legitimidad al sector opresor frente a cada vez más personas, y desmoralizaba a la vez a sus propias filas.
Esta doctrina de resistencia pacífica fue inspiración de numerosos movimientos sociales a nivel mundial y continúa siendo un método de organización de la protesta social.
También preconizaba la búsqueda de la verdad. Gandhi sostenía que ser honesto y transparente era esencial para construir una sociedad justa.
Defendía igualmente la autonomía (swadeshi): Fomentó el uso de productos locales y la autosuficiencia económica, desafiando el imperialismo británico y promoviendo la dignidad de su pueblo.
Además, Gandhi fue un defensor del vegetarianismo. Consideraba que esta clase de alimentación era una forma de mantener el cuerpo puro y saludable, y de equilibrar la mente, el cuerpo y el espíritu. Además, ser vegetariano era una decisión de índole moral, ya que se oponía a cualquier forma de maltrato animal.
Gandhi llevó una vida sencilla, sin lujos. Confeccionaba sus propias prendas de vestir y se ajustaba a las doctrinas hinduistas de purificación y paz interior, entre ellas la del celibato (a partir de los 36 años de edad).
Legado de Gandhi
Su enfoque en la resistencia no violenta y la desobediencia civil se convirtió en un legado duradero que ha influido en movimientos de liberación en todo el mundo.
La filosofía de Gandhi, conocida como satyagraha, se basaba en la creencia de que la verdad y la no violencia eran armas poderosas para lograr el cambio. Creía en la importancia de la resistencia pacífica y la capacidad de los individuos para desafiar la opresión sin recurrir a la violencia.
Aunque Gandhi fue encarcelado en varias ocasiones y enfrentó numerosos desafíos y obstáculos, su liderazgo pacífico y su mensaje de unidad resonaron en todo el país. Su influencia fue fundamental para movilizar a la población india y despertar un sentido de identidad nacional y orgullo cultural.
El legado de Gandhi continúa siendo relevante en la actualidad, ya que su filosofía de resistencia no violenta sigue siendo una herramienta poderosa para luchar contra la opresión y promover los derechos humanos en todo el mundo.
Luces y sombras en la vida de Gandhi
Gandhi es considerado un símbolo de la paz y la no violencia, pero algunos capítulos de su vida se contradicen con los valores que predicaba. En los últimos años han surgido algunas sombras y dudas sobre sus objetivos y los métodos que utilizaba para conseguirlos.
Así, por ejemplo, la Universidad de Ghana retiró la estatua de Gandhi en 2018 tras las protestas de los estudiantes, que lo consideraban una figura racista.
Algunos historiadores aseguran que Gandhi era clasista y racista. El hecho de proceder de una familia rica hizo que, durante su infancia, se mantuviera alejado de la pobreza y fuera indiferente a la desigualdad que padecían las clases sociales más pobres en la India.
Después de licenciarse se trasladó a Sudáfrica para trabajar como abogado en una empresa india. Allí fue consciente de las injusticias raciales que existían contra la gente de color. No obstante, Gandhi se involucró en la lucha por los derechos de la minoría india pero no hizo nada por combatir el racismo y la desigualdad que sufrían los negros.
En algunas cartas que escribió durante aquella época, Gandhi considera que la población negra es inferior y describe a los africanos como “salvajes”.
Por otro lado, antes del inicio de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), Gandhi estuvo en contacto con los regímenes fascistas de Benito Mussolini en Italia y de Adolf Hitler en Alemania.
En 1931, Gandhi participó en unas conversaciones de paz entre los gobiernos británico e indio que se organizaron en Londres. De regreso a la India, el gobierno de Mussolini lo invitó a visitar Italia, donde lo invitaron a asistir a un desfile de las juventudes fascistas italianas.
En el caso de Hitler, hace algunos años salieron a la luz unas cartas en las que Gandhi se dirigía al Fuhrer como “su más sincero amigo”, un formalismo de despedida en inglés.
Aquellos que defienden la figura de Gandhi aseguran que se trataba de una forma de llevar el pacifismo y la no violencia al extremo, tratando a dictadores con la misma cortesía con la que trataría a cualquier otra persona.
Por si fuera poco, también han surgido acusaciones de pedofillia. A los 36 años, Gandhi decidió hacer voto de castidad y no practicar más el sexo para alcanzar una plenitud espiritual. Por extensión, aquella decisión afectó también a su mujer, aunque ella no pudo opinar sobre el tema. Sin embargo, como el propio Gandhi explicaba, solía dormir desnudo con niñas para poner a prueba su voluntad. Según su filosofía, un hombre capaz de contener sus impulsos en una situación así sería incapaz de mentir o herir a nadie.
Conclusiones
Mahatma Gandhi, conocido como el padre de la independencia india, encarna la esencia de una vida vivida con propósito, resistencia y humanidad. Su legado como líder del movimiento de independencia de la India y su innovadora filosofía de la no violencia trascienden las fronteras geográficas y temporales, dejando una huella imborrable en la conciencia colectiva global.
“Sé tú el cambio que quieres ver en el mundo”. Esta frase resume el estilo de liderazgo de Mahatma Gandhi.
Se caracterizó por ser un líder transformacional, como lo definen varios expertos en liderazgo. Utilizó su influencia y autoridad para generar cambios importantes en su pueblo. Creó el movimiento nacionalista indio. Instauró diferentes métodos de lucha, como las huelgas de hambre, y en sus programas rechazaba la lucha armada y predicaba la no violencia como único medio para enfrentar el dominio británico.
Por último, señalar que Gandhi nunca ha recibido el premio Nobel de la Paz, aunque ha sido nominado cinco veces entre 1937 y 1948; y décadas después, sin embargo, el Comité que administra el premio Nobel declararon la injusticia de tal omisión, que atribuyeron a los sentimientos nacionalistas divididos que negaron tal premio a Gandhi.
Referencias
Oscar Castillero Mimenza. (2017, abril 17). Mahatma Gandhi: biografía del líder pacifista hindú. Portal Psicología y Mente. https://psicologiaymente.com/biografias/mahatma-gandhi
https://www.ecured.cu/Mahatma_Gandhi
https://humanidades.com/mahatma-gandhi/












