Búffalo Bill, la construcción de una leyenda

Os invitamos a acompañarnos en un pequeño viaje en el espacio y tiempo para llegar al salvaje Oeste. Vamos en busca de un personaje de leyenda, Búffalo Bill.

Y es que este famoso vaquero concentra la imagen romántica del salvaje oeste, que difundió con sus espectáculos circenses.

Su biografía, como veremos luego, nos habrá de un hombre polifacético, pues fue un cazador de bisontes, buscador de oro, rastreador, explorador, guía de caza, tirador, soldado del ejército americano, showman en varios espectáculos del oeste en los que se recreaba, de forma dramatizada, la vida en el oeste americano, en los que ejercía además como empresario.

 

Biografía de Búffalo Bill Cody

De nombre William Frederick Cody, nació el día 26 de febrero del año 1846, en el estado de Iowa, concretamente en Scott County (EE.UU). Era hijo Isaac, de un hombre de negocios canadiense y María, una maestra americana.

Vivió durante varios años en la ciudad de su padre, Toronto, en Canadá, antes de regresar con toda su familia al Territorio de Kansas.

Sus padres fueron activos en el movimiento abolicionista, tema en pleno auge en aquellos tiempos, y que terminaría derivando en una guerra civil.

Empezó desde muy joven a intentar lograr salir adelante, utilizando el caballo como medio de vida, sobre todo tras el fallecimiento de su padre (fue apuñalado en un discurso a favor de la abolición), cuando William tenía apenas 11 años de edad.

Con veinte años ya acreditaba ser un buen jinete, rastreador y tirador.

Con 14 años intentó alistarse en el ejército, pero no pudo hacerlo por su corta edad. Colaboraría igualmente como explorador para el ejército de la Unión.

 

Desempeñó numerosos y diferentes oficios. Así, se sabe que trabajó como asistente de mensajería para la compañía Pony Express, fue buscador de oro, trabajó como explorador en las campañas del Quinto de Caballería del ejército americano en la guerra contra los indios que habitan el territorio al oeste del rio Mississippi.

También se dedicó a la caza del búfalo, en la que demostró grandes habilidades, y cuyo destino era obtener carne para alimentar a los trabajadores del ferrocarril del Pacífico, que se estaba construyendo en esos momentos para poder dinamizar los territorios de expansión. Para ello firmó un contrato con la empresa ferroviaria Kansas Pacific Railroad. Fue la época en la que trabó amistad con otra futura leyenda del oeste americano, y turbia personalidad: Wild Bill Hickock.

 

Tras el fallecimiento de su madre, Cody se alistó en el 7º Regimiento de Caballería de Kansas y combatió para la Unión durante la Guerra Civil.

En el año 1866 contrajo matrimonio con Louisa Frederici, con la que tendría cuatro hijos.

 

De 1868 a 1872, como soldado, William Cody luchó en las Guerras Indias y formó parte de las represalias contra los indios en respuesta por la masacre de las tropas de Coster durante la Batalla de Little Bighorn.

 

En el año 1895, Cody trabajó en Wyoming, donde fundó la ciudad de Cody, a unos 80 kilómetros del parque de Yellowstone. Con el tiempo se convirtió en un atractivo turístico para muchos dignatarios y líderes políticos que venían buscando su leyenda.

Fue tal su pericia cazando bisontes, que se dice que en tan solo 8 meses fue quien de abatir 4.280 ejemplares.

Fruto de toda su extensa trayectoria, se convirtió en un hombre con grandes conocimientos del territorio del lejano Oeste, además de entender y comprender las costumbres de los nativos de estas tierras.

Con esta trayectoria y en un país nuevo, necesitado de mitos y leyendas, es fácil entender la difusión que tuvieron sus actividades, alcanzando así el grado de héroe popular, protagonizando primeras páginas de periódicos y varias novelas.

Su vida cambió cuando el escritor Ned Buntline le eligió como figura literaria para sus exitosos folletines sobre Búffalo Bill, donde el autor hablaría de los mayores logros de Cody en vida, pero aumentaría o incluso inventaría la mayoría de ellos. En 1872, Ned invitaría a Bill a actuar en una obra que reconstruía las historias del Viejo Oeste. William se interpretaba a sí mismo, aunque nunca había actuado y sus primeras actuaciones fueron muy amateur. Búfalo Bill tenía una presencia magnética en el escenario. Pasó 10 años actuando en este espectáculo del Viejo Oeste, donde su papel principal fue reconstruir la batalla en la que arrancó el cuero cabelludo al guerrero indio Cheyenne Cabello Amarillo.

 

En la cumbre de su fama, las clases acomodadas de la Costa Este, así como la nobleza europea, reclamaban sus servicios como guía en sus partidas de caza. Consciente de la admiración que despertaba su figura, en el año 1883 fundó su propio espectáculo, en Omaha (Nebraska) una mezcla de actuación circense y lección de historia en la que dramatizaba la vida del Lejano Oeste e incluía pintorescas exhibiciones de puntería, monta y conducción de diligencias. En su reparto figuraban grandes tiradores, indios (el mismo Toro Sentado llegó a formar parte de él) y animales. Este espectáculo llevaba por nombre: “Búffalo Bill’s Wild West”.

 

Este espectáculo viajó por todo Estados Unidos durante casi veinte años, llegando a tener hasta 1200 empleados. Era algo muy ecléctico pues en escena aparecían desfiles de caballos y jinetes no precisamente propios de estas tierras: turcos, gauchos, árabes, mongoles, cosacos,… También participaba Toro Sentado y unos veinte de sus guerreros. Y personajes reales, como Annie Oakley y su marido Frank Butler hacían demostración de tiro.

 

Había simulaciones teatralizadas de ataques indios a caravanas de carretas, asaltos a diligencias, etc, participando otro  personaje muy conocido: Calamity Jane. El espectáculo por lo general concluía con una representación melodramática de la batalla de Little Big Horn, en la cual Cody hacía el papel del general Custer.

 

Adultos y niños se sorprendieron al ver en vivo las historias que habían leído en los periódicos y revistas.

 

Después de ganar América, Búfalo Bill llevó a su compañía a una gira por Europa, donde actuarían para la Reina Victoria en su jubileo. Sin embargo, un grave accidente ferroviario marcaría el principio del fin del gran espectáculo de Búfalo Bill. Increíblemente, el accidente no tuvo víctimas humanas fatales, pero el espectáculo había perdido más de 100 animales, incluyendo las dos monturas más famosas: El Público y El Hígado. Además, una de las estrellas más famosas del espectáculo, la famosa tiradora Annie Oakley, resultó gravemente herida.

El espectáculo de Búfalo Bill se recuperaría de la tragedia, pero una serie de inversiones infructuosas llevarían a la quiebra a Bill. Su programa iría a una subasta para pagar sus deudas.

 

Cody se retiró del mundo del espectáculo apenas dos meses antes de su fallecimiento, que tuvo lugar en su hogar en Denver, el día 10 de enero del año 1917, como consecuencia de una enfermedad renal.

Fue enterrado, por propio deseo, en la montaña del puesto de observación de Colorado, al oeste de la ciudad de Denver.

 

Pero ese deseo no pudo ser cumplido inmediatamente, ya que para realizar el entierro hubo que esperar la llegada del verano, para que el suelo no estuviera congelado. Por eso, durante varios meses, el cuerpo de Cody estuvo en una funeraria de Denver.

Su funeral se ofició siguiendo el rito masónico.

 

 

Anécdotas

Con una vida tan polifacética, larga y en un mundo tan cambiante es fácil suponer que hay un gran número de anécdotas relacionadas con su vida, algunas ciertas, otras inventadas, y las demás, quien sabe. Veamos algunas de ellas:

 

• El origen de su apodo (Búffalo Bill):

Parece ser procede de dos acontecimientos: su fama como cazador de bisontes (búffalo en inglés). Y Bill procede del apodo que utilizaba otro cazador de bisontes, llamado William que decía que era el verdadero Búfalo Bill. Para resolver la disputa por el título, William Cody y William Comstock se pelearon por quién mataba más búfalos. Cody mató a 68 búfalos en solo 8 horas de competencia, uno cada siete minutos, mientras que su rival mataría a 48, pudiendo ser la clave del éxito de Cody el hecho de utilizar un rifle de repetición que, aunque más corto, permitía realizar muchos más disparos que su rival. Así, Búfalo Bill consolidaría su apodo.

 

• Las vicisitudes de la Medalla de Honor que le concedieron:

Búffalo Bill recibiría, en el año 1872, la Medalla de Honor por sus actos de valentía, mientras servía, en calidad de explorador civil para el 3ª Regimiento de Caballería. Esta medalla le fue revocada el 5 de febrero de 1917, veinticuatro días después de su muerte, porque al ser él un civil no era elegible para la condecoración según las nuevas pautas vigentes en 1917. La medalla le fue restaurada por el ejército en 1989.

 

• Búffalo Bill en Barcelona:

Desembarcó en el puerto de Barcelona, acompañado de su circo, el 18 de diciembre de 1889, a las 11 de la mañana. Permanecería en la ciudad durante cinco semanas.

En la ciudad la expectación era grande desde que meses antes se anunciase la llegada del espectáculo del legendario cazador de bisontes. Una muchedumbre de ciudadanos se agolpó en el puerto para recibir a la compañía y el propio Búffalo Bill dio una multitudinaria rueda de prensa rodeado de indios bajo el mismo monumento a Colón en la que informó que actuaría en un hipódromo construido para la ocasión en la calle Muntaner que tenía capacidad para 2.000 personas.

Corría el rumor de que cada vez que Búffalo Bill llegaba a una ciudad soltaba unos búfalos por la ciudad para luego darles caza a lazo por las calles, cosa que no ocurrió para decepción del público que vio como los animales eran desembarcados en sus correspondientes jaulas.

El nuevo hipódromo construido expresamente para la ocasión, en la esquina de las calles Aribau y Rosellón y cuya entrada estaba situada en la calle Montaner del barrio de Gracia era el escenario escogido para llevar a cabo la representación de William Frederick Cody, como se llamaba en realidad.

 

 

Una de las atracciones de la compañía eran los 200 indios que formaban parte del espectáculo y que, siempre según la prensa de la época, se alojaban en sus propias tiendas de campaña y tenían prohibido salir solos por la ciudad sin ser debidamente escoltados ya que eran extremadamente peligrosos “pues son temibles y cometen toda clase de desmanes si prueban bebidas alcohólicas, a las cuales son sumamente aficionados, sobre todo al aguardiente”. La prensa hizo hincapié en que “los indios y los blancos del campamento dormían separados para «evitar una nueva guerra”.

El 21 de diciembre se celebró la primera actuación a unos precios que oscilaban entre una y cinco pesetas, un verdadero fortunón para la época pero que muchos barceloneses siguieron gratis desde las azoteas de los edificios cercanos.

Los números más aplaudidos fueron cuando un mexicano entró con una bandera española acompañado de un soldado norteamericano con otra de barras y estrellas, y cuando Búffalo Bill demostró sus habilidades con el rifle acertando a unas bolas de cristal que le iban lanzando unos indios mientras él cabalgaba al galope.

Como anécdota especial en Barcelona se dice que Búffalo Bill, aquejado de un terrible dolor de muelas, acudió al Hospital de la Santa Creu y le fue extirpada una pieza dental que estuvo expuesta en el hospital hasta que alguien la robó y se le perdió la pista definitivamente.

 

• Su legado:

En contraste con su imagen estereotipada de hombre duro, Búffalo Bill impulsó los derechos de los indios americanos y de las mujeres. Además, a pesar de su pasado como cazador de bisontes, apoyó su conservación denunciando la caza furtiva y presionando para instaurar una temporada de caza.

Siendo un explorador de la frontera que respetó a los nativos, fue un partidario firme de sus derechos. Empleó a muchos indígenas además de a Toro Sentado, con la convicción de que su espectáculo les daba a ellos la posibilidad de una vida mejor, llamándolos “el anterior enemigo, actual amigo, el americano”.

Su imagen se explotó como parte de la cultura americana, tal y como se refleja en la aparición de su persona en numerosos trabajos audiovisuales, cinematográficos, literarios, televisión, etc.

La ciudad de Cody, en Wyoming, fue fundada en 1896 por Cody y varios inversores.

 

• Su museo:

En la ciudad de North Platte, Nebraska se celebra el “Nebraskaland Days”, un festival anual que incluye conciertos y un rodeo grande. El hogar de Cody, en North Platte, es un museo y un destino turístico para los miles de personas que lo visitan cada año.

 

• Búffalo Bill en el cine:

Protagonista de muchas obras y creaciones en todos los medios de difusión y comunicación: prensa, literatura, arte, cine, televisión. En este ámbito, el cinematográfico, hemos localizado más de 50 producciones (seguramente sean muchas más) en las que, o bien como protagonista, o bien como personaje secundario, nuestro ya conocido William Frederick Cody, acapara la historia principal. Veamos algunas de ellas:

• • La última frontera, de 1926, de George B. Seitz, contando como protagonista con el actor William Boyd
  • Wyoming, del año 1928, dirigida por W.S. Van Dyke, e interpretado por Willian Faibanks
  • Búffalo Biil, de 1936, dirigida por Cecil B. DeMille. El protagonista era Gary Cooper.
  • Las aventuras de Búffalo Bill, del año 1944, dirigida por William A. Wellman y en la que el papel protagonista corre a cargo de Joel MacCrea.
  • Búffalo Bill en territorio Tomahawk, de 1952, dirigida por Bernard B. Ray, y con Clayton Moore liderando el reparto.
  • El triunfo de Búffalo Bill, de 1953, dirigida por Jerry Hopper. En esta ocasión Cody es interpretado por Charlton Heston.
  • Búffalo Bill y los indios, producción de 1976 dirigida por Robert Altman. El intrépido protagonista de esta historia es interpretado por Paul Newman.
  • Wild Bill, del año 1995, largometraje dirigido por Dexter Fletcher y protagonizado por Keith Ian Carradine.

 

 

Conclusiones

Búffalo Bill Cody fue una figura y polifacética, cuya vida y carrera dejaron una huella duradera en la historia del Salvaje Oeste y en la cultura popular.

Forma parte de ese elenco de leyendas del Lejano Oeste americano en el que también tienen cabida otros personajes como Billy el Niño, Toro Sentado, Jesse James o Wyatt Earp, entre otros. Cada uno de ellos pasó a la historia por muy distintos motivos; en el caso de Bill por su extraordinaria puntería.

 

Búffalo Bill fue, en buena medida, el inventor del western, pero no solo eso, también forjó una identidad nacional para un país en proceso de construcción. Muchas de las claves del espíritu nacional de Estados Unidos surgen de la puesta en escena de su circo.

 

Y rematamos esta publicación, confiando en que, pese a su larga extensión, haya resultado de vuestro interés, y en ese caso nos gustaría que nos lo hicieseis saber pulsando en el botón “Me gusta”. Además, te animamos a aportar algún comentario, y si tienes interés, suscribirte gratuitamente a la Newsletter del Blog para mantenerte siempre informado sobre las nuevas publicaciones del Blog.

Por último, si os ha gustado lo suficiente como para compartirlo en vuestras redes sociales, estaríamos realmente encantados de que así lo hicieseis.

 

 

Referencias

HistoriaUniversal.org. (2023). Búffalo Bill Cody: Figura del Salvaje Oeste y espectáculos. HistoriaUniversal.org. Recuperado de https://historiauniversal.org/buffalo-bill-cody-figura-del-salvaje-oeste-y-espectaculos/

https://www.biografiasyvidas.com/biografia/b/buffalo.htm

https://www.elcafedelahistoria.com/buffalo-bill-barcelona/